Casi todo el mundo se acordará de Marty McFly tocando la guitarra en el baile de graduación de sus padres, mientras sus dedos comienzan a desaparecer. Y es que, sin lugar a dudas, esta película tiene la culpa de que muchos hayamos soñado alguna vez con poder viajar en el tiempo. Pocos lo consiguen, pero algunos, gracias a la fotógrafa argentina Irina Werning, lo han logrado sin necesidad de montar en un Delorean.
Irina es una fotógrafa freelance que en la actualidad reside en Londres, donde da rienda suelta a todo el poder de su imaginación, por lo que se puede apreciar al entrar en irinawerning.com. Como comenta en su página web, empezó este proyecto porque le encantaban las fotos antiguas. Cuando iba a casa de cualquiera se fijaba en sus fotos personales y esa pequeña obsesión le llevó a invitar a la gente a volver a su pasado.
Por ahora, sólo podemos viajar hacia atrás, reviviendo las fotografías de cuando eramos jóvenes, pero quién sabe, a lo mejor un día de estos alguien inventa una máquina que nos permita viajar al futuro, para hacernos una fotografía de nosotros mismos.
Aunque si me dan a elegir, en vez de hacerme fotos, preferiría comprar el almanaque de todos los resultados deportivos de los próximos 10 años.
No hay comentarios:
Publicar un comentario